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Las Torres de Serranos en Valencia son visita obligada por su valor histórico y monumental un símbolo de la Ciudad.
Las Torres de Serranos son un símbolo de Valencia. Junto con las Torres de Quart forman parte del paisaje autóctono levantino. El dicho histórico o frase hecha: “Quedarse a la Luna de Valencia” nace precisamente con las Torres, de Serranos porque antiguamente se cerraban las puertas (de las Torres de Serranos) de la ciudad para que los invasores y los vándalos no pudieran acceder al recinto amurallado durante la noche. De esta manera, los habitantes de la urbe quedaban protegidos de los peligros que acechaban extramuros. Se encuentran situadas junto al antiguo cauce del Turia y son un emblema ciudadano y turístico.
Antiguamente había 12 puertas monumentales para acceder a la ciudad, siendo esta la más concurrida y habitual. La construyó Pere Balaguer a finales del Siglo XIV. A la parte superior se puede acceder mediante una escalinata con múltiples recovecos y zaguanes. Se puede pasar por debajo de su monumentalidad por el acceso adoquinado que mantiene. En ocasiones se ponen banderas alusivas a acontecimientos especiales en lo alto de las Torres de Serranos, además de la bandera de la Comunidad Valenciana, o simplemente enseñas conmemorativas de hechos históricos.
Hay que destacar que durante la Guerra Civil Española, las Torres se utilizaron como lugar de almacén de las obras de arte del Museo del Prado. De este modo se conseguía evitar en caso de bombardeo que se dañaran. Con anterioridad se habían usado las instalaciones de las Torres de Serranos como lugar de recepción de embajadores y también como prisión.
Cada año, a finales del mes de febrero, la Fallera Mayor de Valencia realiza un llamamiento a los valencianos desde este lugar emblemático para invitarles a celebrar las fiestas y a realizar la Cridà todos los falleros.
Además, también se puede realizar una visita y subir para poder contemplar las vistas de la ciudad y la monumentalidad de sus esculturas.
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